Algunos apuntes, luego de ver la película "Libertarias".

Film de 1996 ambientado en la revolución y guerra civil española, en 1936. Un grupo de mujeres anarquistas pertenecientes a la organización feminista del Movimiento Libertario Español, Mujeres Libres, cogen las armas junto a sus compañeros anarquistas. Ellas pensaban firmemente en que la revolución no solo legitimaría la libertad de pensamiento y organización de las personas, sin ningún tipo de opresión, sin Estado; sino que significaba la oportunidad fundacional para que varones y mujeres sean considerados iguales en derechos y oportunidades. Aunke inicialmente tuvieron problemas, pues los milicianos solo las encontraban útiles curando a los heridos o cocinando para
los combatientes; luego, ellas demostraron ser mucho más útiles que para esas labores. A pesar de que se les prohibió ke lucharan, ellas siguieron firmes y participaron en varios motines y arriesgándose a la represión, como sus compañeros.

Lo triste de todo fue que acabaron como muchas luchadoras: vulneradas, violadas, humilladas. Y esto me lleva a una reflexión mayor: ¿Cómo nos vulneran actualmente? No a todas nos violarán pero se nos golpea, se nos insulta y sobre todo, se nos subestima. No hablo/escribo con el hígado ni mucho menos con el rencor. Ya mencioné que últimamente escribo con el alma tranquila. ¿Pero no es acaso indignante que aún se nos argumente que debemos cumplir con ciertas tareas u obligaciones por el simple hecho de ser mujeres? o ¿qué cosas no debemos hacer por nuestra misma condición?

La lucha continúa. Ya no necesitamos demostrar(nos) que podemos coger un fusil, organizarnos, pelear cuerpo a cuerpo, al menos en occidente. En nuestro contexto -Latinoamérica- por ser un espacio plural, lleno de creencias, tradiciones y costumbres, nuestra batalla nos demanda creatividad y nuevas prácticas en nuestra cotidianidad.

Reinventemos nuestras formas de luchar.

Y una sonrisa siempre ayuda.


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