Elmo-Cirilo-Molina

El primer acercamiento que tuve hacia Cirilo fue cuando leí sobre él para el curso de Parentesco y organización social. Estaba en el 1er ciclo de la facultad de Sociales: antropología- en el 2004-II. Tenía 19 años. El libro: La verguenza de los Pandilleros

Cirilo era el líder de Los Halcones, pandilla del barrio "El Planeta", ubicado en la márgen izquierda el río Rimac, en la popular zona conocida como Cárcamo (donde quedaba la Cachina). Según el autor- Martín Santos- El Planeta era un barrio que mantenía conflictos con los aledaños, de los cuales solo recuerdo "El Rescate" y "Villa María". Los problemas se remitían, especialmente, a la conquista de los espacios/territorios, las esquinas tomadas para hacer hora, el jale con las chicas en las fiestas, y el reconomiento de la población como grupo dominador.

El libro, simplemente, me encantó. Me deslumbró. No solo por la temática que era interesantísima -grupo de pares, identidad, jóvenes, violencia, calles, códigos, pertenencia, marginalidad-, sino por la misma estructura del libro, el orden de los capítulos, la dedicatoria, las palabras son cuchillas cuando las manejan orgullos y pasiones (verso de Estrechez de corazón de Los Prisioneros), todo. Me gustó tanto, realmente. Incluso pensaba en que mi tesis, el día que la hiciera, tendría una estructura similar. (pensamientos de una cachimbita) y ahora parece que, más bien, vamos a coincidir con la temática.

Cinco años después, luego de acabar la carrera, chambear y viajar por algunas ciudades del país, someterme a un tratamiento psicológico (¿?) e intentar avanzar con mi investigación -tesis-, vengo a conocer al buen Elmo Molina, "Cirilo" para los Científicos Sociales. Recuerdo que vi una foto de él, su flaca de esas épocas -90´s- y a su calato, incluso una foto de él con el sociólogo. Ahora lo tenía frente a mi con unos añazos encima, con sus blinblin, ocho anillos brillantísimos, pantalón y polo anchos. En primera instancia una persona aparentemente agresiva -de esos a los que se llama achoradasos, tatuado por los golpes, marcado por las experiencias que la vida nos dá; en segunda y el resto de instancias, una mirada transparente y totalmente dulce. Sincera.Todo un honor compartir la mesa con un personaje como él.

[No era tema de este post, pero lo que acabo de escribir me hace pensar en qué tanto las Ciencias Sociales han contrubuido para que se mantenga el estereotipo de pandillero, chico de barrio, violento e inclusive delincuente. En fin. Me siento indirectamente culpable)

Últimamente hemos conversado un poco más, luego de que se me pasara la emoción -osea de conocer al sujeto/objeto de estudio-de tratarlo como persona, como compañero de proyecto, de cambio, de crítica al sistema y por qué no decirlo, de revolución. Conociendo personas como él siento que aún hay mucho por aprender, ya no en las aulas, sino en las calles.

Me alegra saber que ya no lo tendré que conocer más a través de la literatura sociológica, que puede concluir muchísimas cosas interesantes, pero que, por el carácter objetivo que requieren las investigaciones, suelen limitarse bastante.

Gracias Elmo, gracias Cirilo.

http://dh-facilitadores.blogspot.com/2009/03/elmo-molina-de-pandillero-pacificador.html

http://conasec.mininter.gob.pe/valores.htm
http://napa.com.pe/2008/02/08/reportaje-napa-37-maestra-vida/

Comentarios

escribe la novela de tu vida peee

y preséntala como tesis mejor

esa gana por unaminidad

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